Amarga nochevieja  

Posted by aliere in , ,

El otro día os contaba que, a pesar de los pesares, me sigue gustando la navidad. Sin embargo tengo que confesar que no trago la nochevieja. Pero si es una mala copia de la nochebuena en la que por no haber no hay ni regalos.

Primero la familia se reúne, aunque ya no todos por aquello de que los jóvenes quieren armar el cotillón por su cuenta, en torno a la beatísima sor televisión. Como en "El día de la marmota" se repiten los programas de todos los años: el especial de humor refrito, la pugna por ver cuál es el último anuncio antes de las campanadas, un karaoke de presentadores que se creen cantantes y los especiales de después, con cantantes que... ejem, también se creen cantantes. Eso sin contar con la también tradicional Anita la fantástica Obregón enseñando pechuga y Ramonchu con unas pintas que no sabes si le va a dar un muerdo en el cuello o se va a ir a sobrevolar el campanario de la puerta del sol.


Claro que, para ser sinceros, casi lo prefiero al año en que mis padres se empeñaron en que fuéramos todos a ver las campanadas en directo en el ayuntamiento con el calvo talifan de Alonso y la del Tomate. Yo es que necesito mi tiempo para pelar y quitarles las pepitas a las uvas si no quiero empezar el año ya no con mal pie, sino con uno en la puerta del hospital. Porque ya no es sólo lo de las uvas, en casa se ponen pesados con supersticiones de lo más extrañas, que te las ves y te las deseas para no esgonciarte con eso de tomar el cava sólo apoyando el pie derecho, cuando encima hay que ponerse dinero dentro del zapato y todo mientras tratas de no tragarte la sortija de oro que te regaló tu madrina y que navega dentro de tu copa.

Luego se supone que hay que salir por ahí con la diferencia de que no es un día normal, no, es un día en que todos los bares están atestados de niñatos con la corbata en la cabeza y niñas atérmicas en vestiditos de tirantes aunque haga bajo cero en la calle. Vamos, que ahí no entra el futbolín ni de canto. Y antes vendería mi alma a Xuxa Ram que pagar el páncreas por ir a una fiesta pija de esas de música bacaladera y en las que vuelves con el vestido lleno de lodo hasta las rodillas. No, no queréis saber de dónde viene el lodo así que no os lo pienso decir.

Pero encima de estar todo plagadito de gente intentado trincarse el mismo número de copas que de campanadas, esa noche se supone que si no te quedas hasta las mil de la mañana eres una aburrida. Hay que aguantar hasta la hora de tomar el chocolatito con churros por lo menos. Lo malo es que es el único día al año en que en tu cafetería de siempre, en esa en la que el camarero según te ve te sirve el café como a ti te gusta y el periódico abierto por la sección de deportes, te plantan un chocolate de polvos en un vaso de plástico y cuatro churros grasientos y te los cobran a 4 euros. Por supuesto olvídate del periódico y el buen rollito con el camarero, porque ese día han forrado con plásticos la sección del kiosko, con sus revistas y las chuches, como si los clientes fuéramos delincuentes juveniles y entráramos con la intención de mangar una revista porno y tres huevos kinder.

En vista del desolador panorama hay quien decide quedarse en casa, que total hay 364 noches más al año en las que no tienes ni que estrenar traje ni pasar frío para no desentonar (vaaaale, menos si descontamos carnaval o las bodas). Además, total, no hay quien localice a nadie para saber dónde está, con tanta gente mandándose la felicitación moñas del año por el móvil. El problema viene cuando enciendes la tele y cuando al fin el decimoséptimo, ejem (qué tos más tonta, oiga), cantante termina su actuación en todas las cadenas... comienza la teletienda. Sin duda no puede haber forma mejor de empezar el año que agrandarte la chorra, esculpirte los abdominales con descargas eléctricas para que puedas rallar queso en ellos, pedir un crédito recostado en una cama que resiste a dos focas y se hincha con sólo mirarla (si al menos fuera una muñeca, pensaría más de uno) y después meterte en tu propia sauna portátil mientras utilizas tu depilador nasal. Yo también dudaba, pero los análisis de estos productos de Estable dentro de la gravedad me han convencido: click, clock.




Vamos, yo lo pienso hacer todito este año. Bueno, menos lo de la chorra, primero tendría que encontrar el anuncio donde me vendan una o liberar a Willy, si antes consigo encadenar al costillo a la pata de la cama. Así que he decidido cambiar esa parte por su versión femenina, que he encontrado en este bonito sillón que debe ser la mar de cómodo, a juzgar por lo contenta que se ve a la presentadora:


Feliz año nuevo a todos y feliz supervivencia a la noche más extraña del año.

This entry was posted on martes, 30 de diciembre de 2008 at 12:41 and is filed under , , . You can follow any responses to this entry through the comments feed .

2 comentarios

Jejeje! Por eso yo prefiero hacer una no fiesta con mi no pareja y después acostarnos y no dormir...

Hagas lo que hagas, disfruta! Un beso enorme y feliz año!

30 de diciembre de 2008, 14:19

Creo que te voy a copiar la idea de la no fiesta y no dormir, ya que por una vez tengo al costillo cerca y mucho que celebrar.

Un besazo, espero que lo pasaras bien en tus vacaciones y feliz año!!

31 de diciembre de 2008, 11:46

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